¿Qué hacer cuando lo que ves y lo que oyes no coincide? La importancia de confiar en tus propios sentidos
A menudo, nos encontramos en situaciones en las que la información que recibimos no parece ser del todo verdadera. En esos momentos, es importante aprender a confiar en lo que nuestros ojos ven y nuestros oídos escuchan. En este artículo, te explicamos por qué es esencial confiar en tus propios sentidos y cómo puedes hacerlo.
La percepción es subjetiva y puede variar de persona a persona. Lo que para uno puede ser cierto, para otro puede ser falso. Por lo tanto, es importante aprender a confiar en tus propios sentidos y no depender únicamente de la información que recibes de los demás. Si lo que ves y lo que oyes no coincide, confía en lo que ves.
A menudo, la información que recibimos puede ser manipulada o distorsionada. Por ejemplo, en los medios de comunicación, es común que se utilice la técnica del sensacionalismo para atraer la atención del público. En estos casos, es importante aprender a diferenciar entre lo que es real y lo que no lo es. Si algo parece demasiado bueno para ser cierto, probablemente lo sea.
Para confiar en tus propios sentidos, es importante que aprendas a ser más consciente de tus percepciones. Presta atención a lo que ves y lo que oyes, y cuestiona lo que no te parece verdadero. No te dejes llevar por la opinión de los demás, confía en tu propia intuición.
Además, es importante que aprendas a ser más crítico con la información que recibes. Investiga y verifica la información antes de aceptarla como verdadera. No te conformes con la primera versión de los hechos, busca diferentes fuentes y compara la información.
En resumen, cuando lo que ves y lo que oyes no coincide, confía en lo que ves. Aprende a confiar en tus propios sentidos y no dependas únicamente de la información que recibes de los demás. Sé más consciente de tus percepciones y aprende a ser más crítico con la información que recibes. Confía en ti mismo y en lo que ves.
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El Registro Akáshico, es el banco de memorias de la vida, en todas sus posibilidades.
Allí, se archiva todo lo que vivió un alma en sus diferentes reencarnaciones, lo que está viviendo y las cosas que, tal vez, viva en el futuro, pero no desde una forma de adivinación, sino de caminos potenciales.
